CONSEJO:

Al ser un diario será más comprensible si se lee desde la primera entrada. Domingo 29 de noviembre 2009
Gracias por vuestra atención

lunes, 21 de diciembre de 2009

Viernes 18 de diciembre 2009

Pues ya estamos de finde otra vez. En el trabajo el ambiente es algo tirante, por faltar un día y por la baja de tres en plena campaña de navidad, así que creo, que como represalia encubierta me han cambiado el turno por la tarde tanto el sábado como el domingo. Aún así he quedado con Paco a las 24,00h de la noche del sábado para estar juntos hasta las 12,00h de la mañana del domingo, ya que entro a trabajar a las 14,00h. Parece que no le ha importado mucho. Siento curiosidad por este hombre, ¿que excusa pondrá?, ¿dirá que esta de viaje por trabajo?, me tiene despistado. Respecto al trabajo, ya sabéis que todos en los que estás de cara al público son un poco jodidos. Unos más que otros. En mi caso es una gran superficie de bricolaje. Me paso el turno colocando cabeceras y ordenando los pasillos de mi sección, todo eso salpicado de continuas preguntas: ¿Dónde esta tal cosa?, ¿tenéis esto pero de esta forma o color?, ¿Cómo puedo hacer esto?, ¿sirve para esto? Ahora mezcláis todas las preguntas en todas las combinaciones posibles y os haréis una idea de la situación. Por mi parte intento responderlas siempre, acompañando incluso a la persona al pasillo donde debe estar lo que necesita. Detesto que me digan: “esta en el pasillo tal”, “pregunte a fulano”, o “no tenemos”, sin ni siquiera prestar atención, cuando voy a comprar a un lugar de este tipo. En un par de ocasiones me encontrado con algún cliente, y me refiero a los otros clientes, buscando algo relacionado con la electricidad. Mi sección. Generalmente ni se dan cuenta, lo que cambia una persona con el uniforme de trabajo, de que me conocen. Pero al que se da cuenta se le nota enseguida, se ponen nerviosos si van acompañados. No es que me pase mucho, pero pasa. Incluso uno se despistó del amigo con el que iba y me abordó en el pasillo preguntándome si estaba disponible esa noche. Pensaría: -Ya que estoy aquí.- A lo que respondí: -Perdona, pero aquí no puedo hablar de eso, si quieres algo ya sabes donde encontrarme, por favor estoy trabajando.- miro a mi alrededor pero afortunadamente aquello es muy grande. -Pues dame tu número.- insiste. Viéndome obligado a dárselo con un pequeño detalle y es que cambio el ultimo dígito. Así nunca sabrá, si le vuelvo a ver por mi zona, me refiero en la calle, si se equivocó al apuntarlo. Tengo un encargado que está cañón, pero es súper hétero, aunque aquí aplico el primer mandamiento: “No cagues donde comes”. Está noche todos los de mi sección tenemos cena de Navidad. Si, yo tampoco me libro. También se apuntan algunos de la sección de carpintería. Generalmente salgo pitando en cuanto puedo. A que no sabéis lo que me voy a poner. Pues sí, el mejor de los tres trajes que tengo. Que se le va hacer, la cabra siempre, siempre, tira al monte.

No hay comentarios:

Publicar un comentario